Pachuca, Hidalgo.– Luego de que se registrara la muerte de Camila, una perrita pug de 13 años, su familia acusó públicamente al Hospital Veterinario Petterra, ubicado en Plaza Q, por presunta negligencia médica y falta de ética profesional. El caso ha generado amplia difusión en redes sociales, donde se denuncian malos tratos, burlas y omisiones por parte del personal de la clínica. Hoy diversos hospitales brindan respaldo a Peterra 
De acuerdo con la versión difundida por los familiares, Camila fue ingresada el 26 de julio por un problema de tos. A pesar de la negativa inicial de dejarla internada, señalaron que fueron convencidos por la médica veterinaria, quien aseguró que se le administraría oxígeno y nebulizaciones durante la noche. Tres horas después, la familia fue notificada del fallecimiento de la mascota. Al acudir a la clínica, afirmaron haber recibido burlas y agresiones verbales, además de no obtener explicaciones claras.
En respuesta, Petterra emitió un comunicado oficial donde lamentó la pérdida y ofreció sus condolencias a la propietaria, Carolina Beltrán. Según el hospital, Camila ingresó con una urgencia respiratoria grave a las 2:30 p.m., presentando signos clínicos severos que se habían manifestado desde 24 horas antes. Los estudios revelaron un cuadro respiratorio crónico descompensado con inflamación severa. El equipo médico aplicó oxigenoterapia, fluidoterapia y medicación de soporte; sin embargo, hacia las 8:30 p.m. la paciente presentó una complicación respiratoria. Camila entró en paro cardiorrespiratorio y falleció alrededor de las 9:00 p.m.
Petterra señaló que no fue posible realizar intubación por negativa de la familia, lo que limitó las opciones terapéuticas. Además, indicaron que se ofreció la opción de necropsia con médico certificado o con un veterinario externo, pero los propietarios se negaron.
El caso ha provocado una ola de reacciones tanto de apoyo como de crítica. Varias clínicas del gremio veterinario han expresado su solidaridad con Petterra ante lo que consideran una campaña de violencia y difamación en su contra.
El Hospital Veterinario Gómez condenó los actos de hostigamiento, defendiendo la integridad profesional y el compromiso del equipo de Petterra. De igual forma, el Hospital Veterinario Pachuca se pronunció en rechazo a cualquier forma de violencia hacia el personal médico veterinario y destacó la importancia de respetar el libre ejercicio de la profesión.
A estas voces se sumó también la Clínica Veterinaria Aguilar, que respaldó públicamente la labor del hospital señalado, reconociendo la complejidad de atender emergencias críticas y defendiendo la ética, el profesionalismo y el compromiso del gremio. “Defender la vida animal también implica proteger a quienes la cuidan”, expresaron en su comunicado.
El caso sigue generando debate público en redes sociales, al tiempo que expone la necesidad de protocolos claros, diálogo respetuoso y mayor conciencia sobre la atención veterinaria en situaciones críticas.