Miles de habitantes y mineros de Zimapán, Hidalgo, marcharon para pedir el retiro del Sindicato del Cemento, grupo que, aseguran, bloquea los caminos a las minas locales y busca apoderarse del transporte y la economía regional.
La manifestación, que tuvo lugar frente al palacio de gobierno, incluyó consignas contra el sindicato foráneo y con la participación del alcalde Hermilo Trejo Rangel, quien, tras dialogar con los protestantes, se unió simbólicamente a su reclamo.
En medio de tensiones crecientes y la llegada de personas externas a la región, los pobladores piden la intervención del gobierno estatal para resolver la crisis.