Equipos especializados en geología realizan estudios técnicos en distintas comunidades de la sierra hidalguense para determinar si algunas zonas deberán ser desalojadas de manera definitiva, ante el riesgo de deslaves provocado por las lluvias recientes.
Las inspecciones incluyen análisis del terreno, detección de reblandecimientos, desplazamientos de laderas y posibles fallas geológicas que representen peligro para la población. Los primeros reportes confirman condiciones críticas en una comunidad del municipio de Pacula, donde se prevé la reubicación de varias viviendas por daños acumulados de deslaves anteriores.
En otras localidades, como Santa María, los especialistas continúan los trabajos de campo para definir si existen condiciones de estabilidad o si también será necesaria la reubicación. Las autoridades estatales indicaron que los estudios se extenderán a todos los puntos con indicios de riesgo para evitar tragedias y proteger a las familias afectadas.
De acuerdo con la Subsecretaría de Protección Civil de Hidalgo, cualquier indicio de peligro será suficiente para descartar la permanencia de habitantes en zonas vulnerables, pues la prioridad es salvaguardar la vida. Los resultados de las evaluaciones servirán para establecer un plan integral de prevención y reubicación en áreas seguras.
Para fortalecer las acciones, el gobierno estatal solicitó apoyo de un equipo internacional de tecnólogos especializados en estabilidad de suelos y manejo de escurrimientos, con el fin de ampliar los estudios en regiones con antecedentes de fallas estructurales y definir las medidas definitivas para cada comunidad en riesgo . (LineaxLinea)