Tetepango, Hidalgo.— La presidenta del DIF municipal, Adriana Islas Dezha, hizo público un comunicado en el que confirma haber denunciado ante el Ministerio Público a su esposo, el alcalde Enrique Estrada, por presunta violencia familiar, además de señalar presiones e intimidaciones dentro de la administración municipal.
De acuerdo con su declaración, el 25 de octubre Islas presentó formalmente una denuncia por violencia familiar, tras “años de situaciones que vulneraron” su integridad y la de sus hijos. A partir de esa denuncia, afirma, la autoridad determinó medidas de protección para ella y los menores, mismas que dijo ha cumplido en su totalidad.
La presidenta del DIF destacó que es falso que esté impidiendo la convivencia entre el alcalde y sus hijos, y explicó que cualquier interacción está regulada estrictamente por las medidas oficiales emitidas por la autoridad competente: “Mi deber es acatarlas para salvaguardarlos”.
En su comunicado, Islas señala que ha enfrentado retrasos en pagos escolares y de alimentación, así como situaciones emocionales que afectaron directamente a sus hijos. Aseguró que decidió romper el silencio porque “el silencio también lastima”.
Asegura que la situación familiar ya afectó el funcionamiento del DIF
La funcionaria también denunció que la situación ha trascendido al ámbito institucional, acusando presiones e intimidación hacia personal del DIF municipal que derivaron en afectaciones operativas, incluyendo el cierre temporal del Comedor Comunitario de Adultos Mayores de la comunidad de Ulapa.
“Ningún trabajador debe ser objeto de amenazas ni hostigamiento”, enfatizó.
Dijo que ha enfrentado intentos de desacreditar su trabajo y de limitar sus funciones dentro del organismo asistencial, aunque aseguró que ha cumplido con cada una de sus responsabilidades “con compromiso y respeto hacia la ciudadanía”.
Cartulinas retiradas en Palacio Municipal
Como parte de las actividades del Día Internacional para la Erradicación de la Violencia contra la Mujer, Islas participó en una marcha y conferencias. Al finalizar, decidió pegar cartulinas en el Palacio Municipal como un acto simbólico para visibilizar la violencia que enfrentan muchas mujeres.
Sin embargo, denunció que dichas cartulinas fueron retiradas de inmediato, lo que calificó como un acto que “evidencia que la violencia y la negación de nuestra voz siguen existiendo”.
Asegura recibir amenazas y exigencias de retractación
La presidenta del DIF señaló además que, tras la difusión de su denuncia, ha recibido mensajes de apoyo, pero también mensajes con calumnias, exigencias de retractación y agresiones, acusándola de “destruir un proyecto”.
“Yo no estoy hablando del trabajo de nadie. Hoy alzo la voz por mis hijos y por la verdad. Porque la violencia no se calla, la violencia se denuncia”, afirmó.
